Cuando conocí a Alejandro Magno supe que en una ocasión le presentaron un cofre. Les preguntó a sus hombres: “¿Qué podría ser eso tan valioso que debiera ser guardado aquí?”. Le respondieron con propuestas razonables pero él las rechazó todas para ordenar después que colocaran dentro un ejemplar de “La Ilíada”. El implacable conquistador nos mostró así el camino por Leer más…