En los colegios e institutos llevamos a cabo multitud de acciones educativas. Una propuesta muy interesante es elaborar un reportaje de vídeo que recoja lo que hacemos y quede constancia documental de todo ello. Es lo que me (nos) gusta denominar un producto con vocación de permanencia o producto memorable.
Realizar un reportaje de vídeo escolar tiene sus propias normas: de ortografía, sintácticas y semánticas. Todas ellas las tenemos en cuenta para que nuestra narración sea coherente y cumpla su finalidad informativa y comunicativa.
En óctubre de 2008 celebramos una jornada de apertura de la biblioteca escolar del colegio (CEIP «El Justicia de Aragón»). Para realizar el reportaje, tomamos estas decisiones:
– Contamos con dos presentadoras encargadas de ponerse ante la cámara.
– El equipo de redacción elabora el texto que recoge los hechos de los que queremos informar.
– Hacemos una primera corrección cuidando que los textos sean claros y comprensibles y, sobre todo, informen.
– Practicamos ante la cámara para asegurarnos una correcta expresión y una adecuada entonación.
– En esta ocasión hemos optado por utilizar planos medios, procurando mostrar la biblioteca escolar. Así ubicamos al espectador en el lugar que nos encontramos y contextualizamos la información.
– Hemos elegido una música suave y con una melodía dulce para acompañar las locuciones.