
El vídeo nos ha acompañado a mí y al alumnado que he tenido la fortuna de encontrar en el aula a lo largo de más de tres décadas de dedicación profesional. En Illueca, en Movera, en Alcorisa y en Zaragoza los MMAAVV han estado presentes en mi día a día.
A mediados de los 80 un colectivo de docentes entusiastas hicimos un descubrimiento: disponíamos de una herramienta que contribuía a que el alumnado entendiese mejor la sociedad y les permitía ser protagonistas de su aprendizaje. Nos encontramos con el placer de lo narrativo, con el placer multisensorial a través de la fuerza del texto, de la oralidad y el sugerente perfume del lenguaje visual,
Aprendimos que el alumnado es capaz de elaborar productos que nacen de la construcción personal. Es entonces posible la creación de poemas escritos con lapiceros de fotogramas y bolígrafos con onda. Al mismo tiempo descubrimos que sus ideas y emociones conviven con la luz de cada palabra y eso les lleva a propiciar disfrute expresándose y comunicando. Una oportunidad única para descubrir la vida a través de su creatividad y ser actores y actrices de su aprendizaje y exploradores del conocimiento.
A este edificio añadimos la dimensión de la creación colectiva, del despliegue colaborativo y los procesos de asunción de responsabilidades. Un escenario que nos permite construir un universo estético de valores compartidos e introducir las artes en la experiencia del aula para facilitar el desarrollo del pensamiento crítico.