Después de las batallas (Heraldo Escolar).

(Publicado en Heraldo Escolar el 7 de octubre de 2015)

   La LOMCE, esa ley que no enamora, tuvo el dudoso honor de provocar la aparición de trincheras en el mundo de la educación. Mala noticia esa de los frentes. El colectivo educativo aún anda sacudiéndose las esquirlas que dejaron en su herido corazón un curso en el que los estándares fueron los estandartes de la confusión y el empeño de los gobernantes por mejorar la “calidad de la enseñanza” les llevó a acorralar a los profesionales hasta conseguir el efecto menos deseable: la desilusión.

   Pausa y poso. Es lo que necesitamos en las escuelas, en los institutos, en los centros de enseñanza. Porque creemos que la educación debería vivir acomodada en la reflexión, el estudio y el intercambio de saberes, cuando lo habitual es la urgencia, las prisas, los plazos. Porque creemos que el proceso educativo no debe estar al cobijo del vértigo. Porque creemos que la tarea escolar no tiene que rendirle cuentas a la premura ni creemos que todo tenga que estar para “antes de ayer”. Y porque, en fin, creemos que la impaciencia no tiene que ser nuestra compañera de viaje.

  despues_batallasPausa y poso. Y verdadera autonomía de los centros para dibujar su futuro. Derecho a decidir. Y deber de cumplir. Ambos conceptos deben ir de la mano para no correr el riesgo de irnos ahora al polo opuesto. Para ello, deberemos construir equipos de compañeros dispuestos a introducir nuevas herramientas, proporcionar entornos favorables a los centros para que la inestabilidad de las plantillas, los currículos excesivos, los horarios cerrados y los espacios insuficientes sean hechos a favor. Y, por último, habrá que revisar un modelo de formación agotado e insatisfactorio para que la innovación no sea solo cosa de héroes más o menos solitarios que tratan de liderar proyectos no siempre sostenibles.

   La batalla siempre deja dolor en el camino y su paisaje asuela el ánimo más templado. Por eso, quizás sea el momento de acordar que la verdadera innovación en la escuelaaquí y ahora, tiene mucho que ver con el amor.

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