La reunión de fin de curso con las familias fue amable y productiva. Amable porque después de dos años y múltiples encuentros, entrevistas y conversaciones hemos llegado a un punto de complicidad y aprecio que nos hace mucho bien a todos. Productiva porque tratamos algunos temas generales y otros específicos que nos preocupan, a ellos y a nosotros, y pudimos hablar con sinceridad y deseo de mejorar.
Una de las informaciones que nos alegraron, a ellos y a mí, fue que el curso que viene voy a seguir con los dos grupos, con sus hijos, con mis alumnos. Eso nos aportó tranquilidad y calma y pude comprobar, con satisfacción, que a ellos les gustaba la idea. Son dos grupos de chicos y chicas que trabajan con interés y que se llevan muy bien entre ellos.Además, hemos implantado un estilo de trabajo en el que trabajamos con paciencia y cariño las emociones, apostando decididamente por la colaboración y por el desarrollo de la metodología basada en proyectos. En definitiva, que tenemos un horizonte que nos ilusiona.
También se habló largo y tendido de «los deberes». Es este un tema que suscita el debate y el contraste de opiniones. Desde los defensores a ultranza hasta los enemigos de las tareas escolares hay un amplio espacio que trataremos de recorrer para encontrar el necesario punto de encuentro. Y seguro que llegamos a acuerdos.
Y la agenda escolar. Estaba este grupo de padres y madres muy preocupado porque durante el curso que ahora acaba se han encontrado un poco perdidos con ls informaciones de los trabajos escolares y las actividades del colegio y de la AMPA. Por eso solicitaron que el año que viene los chicos tuviesen una agenda con la que poder manejar mejor la comunicación con el colegio. Desde luego que plantearemos el tema a dirección y seguro que encontramos satisfacción.
En fin, que el encuentro ha sido muy beneficioso y de él hemos salido muy contentos. Nuestro mayor deseo es que el curso que viene sea tan fértil como este y que en él sigamos viviendo de la mano del afecto y el esfuerzo común.
¡¡¡Qué alegría, Juan!!! El año que viene con Lucía y con el resto de chicos. Qué alegría. Una noticia que motiva tranquilidad, emociones positivas, agradecimiento, ilusiones…. y que propicia un inicio de verano maravilloso.
¡¡¡Qué alegría!!!
Nos reencontramos en Septiembre.
¡¡¡Feliz Verano!!!